Las 7 Claves del Esguince de Tobillo
Cómo Recuperarte al 100%

Toni Fisioteduca
Primero de todo, este vídeo te va a servir y mucho:
Un esguince de tobillo puede parecer una simple torcedura, pero si no se maneja bien, puede convertirse en un problema persistente. La rehabilitación adecuada no solo te ayuda a recuperarte, sino que también fortalece tu tobillo para prevenir recaídas. Basándonos en el enfoque PEACE & LOVE, aquí tienes 7 claves esenciales para una recuperación efectiva.
1. Protege, Pero No Demasiado
En las primeras horas tras la lesión, es normal querer inmovilizar el tobillo. Sin embargo, demasiada inactividad puede ser contraproducente. Usa apoyo (como un vendaje funcional) si lo necesitas, pero intenta moverte dentro de los límites del dolor.
2. No Te Obsesiones con el Hielo
El hielo puede ayudar a aliviar el dolor en las primeras horas, pero no es el santo grial de la recuperación. El hinchazón es parte del proceso natural de curación, así que en lugar de abusar del frío, enfócate en mantener el tobillo elevado y en moverlo suavemente cuanto antes.
3. Evita Antiinflamatorios en Exceso
Puede ser tentador tomar antiinflamatorios para reducir la hinchazón, pero la inflamación es parte del proceso de reparación. Si el dolor es insoportable, consulta con un profesional, pero evita frenar la respuesta natural de tu cuerpo con medicación innecesaria.
4. Movimiento Temprano y Controlado
Aquí está la clave real. El movimiento es fundamental para que el tobillo recupere movilidad, fuerza y estabilidad. Desde el primer día, realiza ejercicios suaves, como círculos con el pie o flexo-extensión del tobillo sin dolor. Luego, avanza a ejercicios de carga progresiva y equilibrio.
5. Reentrena Tu Propiocepción
El tobillo no solo necesita fuerza, sino también control y estabilidad. La propiocepción (la capacidad de sentir y controlar el movimiento) se pierde tras un esguince. Ejercicios sobre superficies estables e inestables ayudarán a recuperar la estabilidad del tobillo.
6. Reintroduce el Impacto de Forma Gradual
No puedes pasar de caminar a correr de golpe. Primero trabaja el control con ejercicios como saltos suaves o desplazamientos laterales antes de volver a la actividad deportiva. Esto asegurará que el tobillo pueda absorber impacto de forma segura.
7. No Termines la Rehabilitación Antes
Muchas personas dejan de hacer ejercicios cuando el dolor desaparece, pero eso no significa que el tobillo esté al 100%. Completar todas las fases de la recuperación (movilidad, fuerza, propiocepción y retorno a la actividad) evitará recaídas y hará que vuelvas más fuerte.
Conclusión: El Movimiento es la Clave
La recuperación de un esguince de tobillo no es solo descansar y esperar. El movimiento adecuado y progresivo es lo que realmente hace la diferencia.
Si sigues estas 7 claves, no solo te recuperarás más rápido, sino que volverás con un tobillo más fuerte y estable.
¿Te has torcido el tobillo? No te conformes con el "reposo absoluto". Activa tu recuperación con estas estrategias y notarás la diferencia.